La noche anterior siguieron los enemigos sus malditas intenciones, volando la casa inmediata a la de Tarazona llamada de Asín a las 12 dadas, a que se siguió un tiroteo desde las casas de frente y San Francisco al que se les correspondió, como igualmente de bombas y granadas, abriendo una brecha en la pared de la Universidad, pero sin atreverse a pasar a ocuparla. Nuestro amado general se sintió algo indispuesto, lo que ya fue anuncio de nuestras desgracias, siguiendo las enfermedades, muertos las carestías de todas las cosas hasta lo sumo, con una aflicción general.
No hay comentarios:
Publicar un comentario